"Mucho chupador"
El travieso y cabezón sobrino se comunicó desde muy temprano con su curvilínea tía Juana para invitarla al debate de candidatos a gobernador organizado por los billetudos que integran el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El sujeto cabeza de “lec” pretendía estar acompañado de la musa del tío Chupi para presumir a sus cuates tan excelsa hermosura nacida en el privilegiado municipio de Chiquindzonot, pero nunca se esperó que su “t’inti’kí” pariente rechazara la invitación y le respondiera con un contundente y tajante “ma”.
—Pero tiíta linda, el debate se va a poner interesante.
—Qué interesante ni qué nada. Seguro será otro circo en donde en lugar de propuestas veremos acusaciones, pleitos y arañazos.
—Para nada tía, los empresarios son gente seria, responsable y abierta, así que no creo que fallen en la organización.
—Sí, ¿cómo no?
—¿Acaso dudas de los lanudos del CCE, tía?
—Sobrino, si apenas el lunes pasado la Canacintra llevó a cabo un foro con los candidatos y lo hizo en lo oscurito.
—¿Se fue la luz?
—No “mejenkisín”, el llamado foro se realizó a puertas cerradas y los empresarios prohibieron la entrada a los reporteros bajo el pretexto de “era otro formato” y porque iban a plantear a los candidatos “preguntas muy concretas”.
—Tía, y yo que pensé que los empresarios iban a dar el ejemplo de apertura y transparencia, que es lo que tanto predican.
—Sobrino, además, tengo una mala experiencia del debate anterior cuando viajé a la Ciudad de México para ver el encuentro con los aspirantes presidenciables.
—“Uay”, tía, no me digas que los chilangos te acosaron al ver tu escultural anatomía.
—Peor que eso, sobrino.
—¡Tía!, masi te hicieron “k’oy”.
—“Mejenkisín”, deja de decir porquerías o te caigo a “uasc’opazos”.
—Pero entonces, ¿qué te sucedió en la Ciudad de México?
—Sobrino, acuérdate que se extravió el tío Chupi y tuve que avisar a la policía capitalina para que lo localizaran.
—Ah, pero acuérdate que estaba muy feliz con Felipe Calderón chupando en un bar cerca del Palacio de Minería.
—Por eso no quiero viajar a Mérida para asistir al debate.
—Pero acá no viene Felipe Calderón, tía.
—Pero va a estar Renán Barrera.
—No tienes por qué preocuparte, tía, el candidato panista a la alcaldía ya se regeneró después de haber pisado el bote cuando fue detenido en un retén del alcoholímetro hace un mes.
—Sí sobrino, pero a lo mejor tu tío Chupi se encuentra al hijo del alcalde de Progreso.
—Pues que lo lleve al puerto.
—No “mejenkisín”, acuérdate que a José Cortés Rodríguez también le gusta el chupe y apenas el domingo pasado, en pleno Muelle de Chocolate irrumpió con su camioneta totalmente ebrio y chocó cuatro vehículos con el riesgo de atropellar a niños y demás paseantes que se encontraban en el sitio.
—“Uay” tía, tienes razón. No vaya a ser que el tío Chupirul también se enrole con Diego Coral y arme su show.
—¿Y quién es ese tal Coral?
—Tía, el subdirector de Policía y Prevención del Delito de Kanasín, quien también piso bote el pasado domingo luego de ser detenido en un retén por andar chupando.
—“Uay” sobrino, puro chupador.
—Tía, ¿el tío Chupi es chupador?
—Sí, pero de otras cosas, no de alcohol.
—Qué guardadito lo tenía mesticita;
—Condenado perro no malinterpretes, tu tío es gran chupador pero de chinas, de naranjas dulces, de jugosos cítricos.
Ya aclaradas las cosas y pese a la insistencia del cabezón sobrino para que lo acompañara al debate, la tía Juanita le reiteró su cortón y prefirió ir al Kukulkán a comprar su boleto para asistir con su hombre al partido de béisbol y ver que debute Alicia Gordoa, como mujer ampáyer de la Liga Mexicana de Béisbol.
El sujeto cabeza de “lec” pretendía estar acompañado de la musa del tío Chupi para presumir a sus cuates tan excelsa hermosura nacida en el privilegiado municipio de Chiquindzonot, pero nunca se esperó que su “t’inti’kí” pariente rechazara la invitación y le respondiera con un contundente y tajante “ma”.
—Pero tiíta linda, el debate se va a poner interesante.
—Qué interesante ni qué nada. Seguro será otro circo en donde en lugar de propuestas veremos acusaciones, pleitos y arañazos.
—Para nada tía, los empresarios son gente seria, responsable y abierta, así que no creo que fallen en la organización.
—Sí, ¿cómo no?
—¿Acaso dudas de los lanudos del CCE, tía?
—Sobrino, si apenas el lunes pasado la Canacintra llevó a cabo un foro con los candidatos y lo hizo en lo oscurito.
—¿Se fue la luz?
—No “mejenkisín”, el llamado foro se realizó a puertas cerradas y los empresarios prohibieron la entrada a los reporteros bajo el pretexto de “era otro formato” y porque iban a plantear a los candidatos “preguntas muy concretas”.
—Tía, y yo que pensé que los empresarios iban a dar el ejemplo de apertura y transparencia, que es lo que tanto predican.
—Sobrino, además, tengo una mala experiencia del debate anterior cuando viajé a la Ciudad de México para ver el encuentro con los aspirantes presidenciables.
—“Uay”, tía, no me digas que los chilangos te acosaron al ver tu escultural anatomía.
—Peor que eso, sobrino.
—¡Tía!, masi te hicieron “k’oy”.
—“Mejenkisín”, deja de decir porquerías o te caigo a “uasc’opazos”.
—Pero entonces, ¿qué te sucedió en la Ciudad de México?
—Sobrino, acuérdate que se extravió el tío Chupi y tuve que avisar a la policía capitalina para que lo localizaran.
—Ah, pero acuérdate que estaba muy feliz con Felipe Calderón chupando en un bar cerca del Palacio de Minería.
—Por eso no quiero viajar a Mérida para asistir al debate.
—Pero acá no viene Felipe Calderón, tía.
—Pero va a estar Renán Barrera.
—No tienes por qué preocuparte, tía, el candidato panista a la alcaldía ya se regeneró después de haber pisado el bote cuando fue detenido en un retén del alcoholímetro hace un mes.
—Sí sobrino, pero a lo mejor tu tío Chupi se encuentra al hijo del alcalde de Progreso.
—Pues que lo lleve al puerto.
—No “mejenkisín”, acuérdate que a José Cortés Rodríguez también le gusta el chupe y apenas el domingo pasado, en pleno Muelle de Chocolate irrumpió con su camioneta totalmente ebrio y chocó cuatro vehículos con el riesgo de atropellar a niños y demás paseantes que se encontraban en el sitio.
—“Uay” tía, tienes razón. No vaya a ser que el tío Chupirul también se enrole con Diego Coral y arme su show.
—¿Y quién es ese tal Coral?
—Tía, el subdirector de Policía y Prevención del Delito de Kanasín, quien también piso bote el pasado domingo luego de ser detenido en un retén por andar chupando.
—“Uay” sobrino, puro chupador.
—Tía, ¿el tío Chupi es chupador?
—Sí, pero de otras cosas, no de alcohol.
—Qué guardadito lo tenía mesticita;
—Condenado perro no malinterpretes, tu tío es gran chupador pero de chinas, de naranjas dulces, de jugosos cítricos.
Ya aclaradas las cosas y pese a la insistencia del cabezón sobrino para que lo acompañara al debate, la tía Juanita le reiteró su cortón y prefirió ir al Kukulkán a comprar su boleto para asistir con su hombre al partido de béisbol y ver que debute Alicia Gordoa, como mujer ampáyer de la Liga Mexicana de Béisbol.
